Hogar es una historia corta que encaja entre Juegos de pasión y La llamada del deseo, pero si aún no has leído la serie o esos libros, también puede leerse sola.
Fue publicada en el 2014 a través de la newsletter mensual de Nalini Singh.
Personajes[]
- Clay Bennett
- Talin McKade
- Jon Duchslaya
- Noor
- Tamsyn
- Sascha Duncan
- Dorian
- Vaughn
Historia[]
–"Listo" –dijo con una tranquila sensación de satisfacción, dando un paso hacia atrás de las extensiones del nido. Los cambios que habían hecho cuando Jon y Noor se habían ido a vivir con ellos funcionaron, pero con Jon creciendo, Clay y Talin habían decidido que él necesitaba un poco más de privacidad. Dado que ellos ya estaban haciendo esas reformas, había sido bastante fácil completar un par de otras pequeñas modificaciones al mismo tiempo.
La habitación de Noor permanecía en el nido principal y en el mismo nivel que la habitación de Clay y Talin para que pudiera correr por el corto pasillo y acurrucarse en la cama con ellos si tenía una pesadilla. Esas pesadillas enfurecían a Clay por lo que mostraban del daño que le hicieron a la niña que ahora era suya, pero ahora ocurrían menos. Tamsyn y Sascha pensaban que Noor estaba sanando en la atmósfera amorosa de la manada y de su hogar; Clay escuchaba la prueba diaria de la sanación en su risa.
La niña era el corazón dulce y cariñoso de su hogar. Ella había empezado a llamar a Talin y Clay, mamá y papá, dos meses atrás y cada vez que lo hacía, Clay sentía como si le hubiera otorgado un regalo. Tally se había roto en lágrimas de felicidad esa primera vez, aunque su compañera de corazón blando había conseguido controlarse hasta que Noor estuvo lejos para oírlo.
En cuanto a Jon, para ser un adolescente, tenía una paciencia increíble con ella. Ayer, Clay le había visto beber té cuidadosamente de una taza de muñecas diminuta solo para hacer feliz a Noor, como Clay había hecho una vez con Tally.
Tenía la sensación de que Noor podría contar con su hermano mayor adoptado para cualquier cosa, siempre. La nueva habitación de ese hermano reposaba sobre un resistente aerosol de ramas a corta distancia del nido principal, pero estaba conectada a este por una pasarela que Talin había advertido que el adolescente usaría con regularidad.
–"No creas que podrás hacer todas tus diabluras allí"–había dicho ella con el ceño fruncido.
Jon, consciente de que ella era todo ruido y pocas nueces cuando se trataba de los que amaba, la había besado en la mejilla, el violeta llamativo de sus ojos lleno de malicia.
–"Finalmente, un piso de soltero donde podré traer a todas mis amigas y tener fiestas salvajes."
Clay sabía que Jon nunca traicionaría su confianza en él. El chico había tenido algunos contratiempos asentándose, pero eso había sido superado, él ya pertenecía a DarkRiver ahora y Clay sabía que haría que la manada se sintiera orgullosa. Cualquier problema en que se metiera no sería nada fuera de lo común para los niños DarkRiver de su edad. En cuanto a meter chicas, bueno, él era un adolescente. Clay sonrió, y poniendo su brazo alrededor de Tally, la atrajo a su lado.
–"¿Feliz?"
–"Muy feliz." –Lo abrazó fuerte, su sonrisa brillante–. "Estoy contenta de haber decidido hacer esta última parte nosotros mismos."
Clay también lo estaba. Dorian y Vaughn habían ayudado con la planificación y la mayor parte de la construcción, pero Clay había querido que este momento fuera privado, entre él y la mujer que era su mejor amiga, así como su amante y su compañera. Extendiendo la mano, frotó una mota de polvo de su mejilla, dejando al descubierto el oro de sus pecas. Besó esas pecas por instinto, su risa envolviéndolo.
Su leopardo se arqueó, golpeando juguetonamente el olor de ella, tan familiar, tan necesario para su existencia. Cada día se despertaba con su olor, y todas las noches cuando se quedaba dormido, lo hacía con el contacto de su piel contra la suya propia. Ahora, ella agarró sus caderas y se puso de puntillas acribillando su cara con besos, cariñosa como un gatito. Noor aún podría estar sanando, pero Tally y Clay habían completado el viaje y juntos, estaban construyendo su futuro, como habían construido este hogar, con un amor que nada jamás podrá romper.
El leopardo deleitado con las caricias, se inclinó para hacer la tarea más fácil para ella.
–"¿Vamos a ir a buscar a los niños?" –Preguntó ella entre besos.
Acariciando sus manos arriba y abajo de su espalda, él asintió con la cabeza.
–"Extrañé a los gamberros hoy." –Noor estaba decidida a ayudar y se consideraba la "Titular de los clavos", mientras que Jon había trabajado fuertemente con los hombres. La única razón por la que no estaban aquí en este momento era que Clay y Talin habían querido sorprenderlos a ambos con regalos especiales.
Le habían comprado a Noor una nueva cama de princesa, con dosel y todo (había sido toda una misión subirla hacia el nido sobre el árbol). En cuanto a Jon, Tally le había preguntando al muchacho si quería decorar su propio lugar y él había escogido lo que quería, pero le habían comprado una pequeña pantalla de comunicaciones propia como recompensa por las excelentes calificaciones que había sacado en la escuela en los últimos doce meses.
Noor estaba tan emocionada cuando vio a su cama que no podía respirar ni hablar.
–"Oh, oh." –Corriendo a través del cuarto, le dio una palmadita a la colcha, tocó las cortinas que estaban atadas a los posters en cada esquina, y empujó físicamente a Jon cuando jugó con ella al decir que le gustaría acostarse en ella y desordenarla.
Dejándose "empujar" por la niña de cinco años y medio de edad, Jon comenzó a recoger sus juguetes suaves de la plataforma a la izquierda de la cama y acomodarlas sobre las almohadas. Noor decidió que eso era aceptable,aunque le ordenó poner ciertos juguetes junto a otros juguetes, "porque son amigos".
Jon actuó más como un chico adolescente en su apreciación de su propio regalo. Encorvándose en el viejo sillón cómodo que había traído desde el nido principal, metió una mano por el oro blanco de su cabello y sonrió.
–"Genial."
Noor, apoyada contra el lateral de la butaca con las dos manos para poder mirar a la pantalla, hizo una mueca.
–"No es tan bonito como mi cama." –Una mirada de preocupación–. "Puedes venir a mi habitación si lo deseas. Te permitiré que te sientes en la cama."
Riéndose por la generosa oferta, Jon la levantó en brazos y la dejó caer sobre su regazo.
–"Mira esto, Noorel ardilla." –Cambió la pantalla de comunicaciones a una caricatura que Noor amaba y obtuvo su atención inmediata–. "Apuesto a que quieres venir a mi habitación ahora."
Noor dio una decisiva sacudida de cabeza, la cola de caballo que ella insistía en llevar igual a la de Tally rebotó.
–"De ninguna manera. Mi cama es la más hermosa del mundo."
De pie en la puerta, mirando a los niños bajo su protección y bajo su corazón, mientras que su compañera sonriente estaba de pie frente a él, con la espalda contra su pecho, el leopardo de Clay ronroneó en la más absoluta satisfacción.
–"Vamos"–le murmuró en la oreja de Tally pasando su mano por su cola de caballo–. "Estarán ocupados por un rato."
Su respuesta fue inmediata, su olor una caricia caliente. Se volvió y deslizó su mano en la suya y se escabulleron lejos, sigilosos como si fueran adolescentes. Joven, Clay pensó al cerrar la puerta de la habitación detrás de ellos, se sentía tan joven cuando estaba con Tally. Tan lleno de posibilidades y esperanza y fe en el futuro. Entonces ella se quitó su camisa mientras le observaba con una sonrisa en los ojos grises rodeados de ámbar, y no hubo más pensamiento, solo un caliente y lento amor entre dos amantes que se conocían hasta el alma.